Si te vas a mudar a un nuevo hogar o estás planeando un cambio de aires de tu vivienda actual le habrás dado vueltas al asunto de los colores de una casa. ¿Cómo elegirlos? ¿Cuáles convienen más? ¿Qué emociones transmiten los diferentes tonos de la paleta? ¿Qué es mejor, paredes blancas o con colores?
Planificar de qué color pintar la casa es una de las tareas previas a una mudanza, aunque también forma parte de las charlas previas a una reforma. Decidir los colores y sus respectivos tonos, cómo combinan con los muebles y los diferentes espacios es fuente de largas discusiones, dudas y potenciales conflictos.
Puede parecer una misión imposible si la decoración no es tu punto fuerte, pero no te preocupes. En esta entrada compartimos contigo una serie de trucos para saber cuáles son los mejores colores para pintar una casa. Lo mejor es que, si te equivocas, solo tienes que volver a dar una mano de pintura.
“Para elegir el color de las paredes de casa debes pensar en los diferentes espacios: en las habitaciones, el salón, la cocina y el baño”
Colores para pintar una casa: ¿teoría?
¡Un manual universitario! Ni mucho menos, no te vamos a endosar una teoría difícil de entender, pero saber cómo funcionan las paletas de color y sus combinaciones te facilitará la tarea de entender el significado de los colores para habitaciones, por ejemplo. Estas son las paletas más conocidas:
- Paleta monocromática: consiste en usar un único color en diferentes tonalidades. La superficie más grande (las paredes) deberían tener el tono más claro. Es fundamental para crear un ambiente sereno en un dormitorio y transmite sensación de unidad.
- Paleta de color complementario: el complementario es un color opuesto en la conocida rueda de color y crea un efecto llamativo. Es una buena idea para una cocina o un cuarto de juegos.
- Paleta de color análogo: los colores análogos están muy cerca en la rueda de color y crean un efecto de armonía. Son una buena elección para una biblioteca o un dormitorio.
- Colores neutros: estos tienen una alta proporción de blanco o negro y son una solución estupenda para utilizar como fondo. Después, puede añadir detalles más llamativos y destacar las texturas de materiales naturales como la madera.
- Colores acromáticos: son combinaciones de blanco, negro y gris. Pueden resultar algo austeras, así que a veces es buena idea añadir detalles cromáticos.
Ahora que ya sabes un poco más sobre el color y cómo combinarlo, bajemos a la pregunta concreta: ¿De qué color pinto mi casa? Antes de entrar en detalles, recuerda que también debes tener en cuenta los muebles y sus colores.
“Si buscas directamente colores relajantes para habitaciones apuesta por una paleta monocromática en torno al blanco o al beige”
¿Cómo elegir el color de las paredes?
Para elegir el color de las paredes de casa debes pensar en los diferentes espacios: en las habitaciones, el salón, la cocina y el baño. Cada sala debería tener unos colores acordes con su función así como la sensación que quieres recibir.
Los colores fríos son una buena elección para las paredes de un dormitorio así como el resto de la decoración: los verdes y azules convierten la estancia en un sitio fresco y relajante perfecto para descansar, leer o soñar a lo grande. Con un poco de blanco tendrás un toque de luminosidad muy agradable.
¿Y en el baño? Como las paredes suelen ser de azulejos esta decisión es importante porque no son tan fáciles de cambiar. Si eliges unos azulejos de color neutro como el blanco después puedes complementar con toallas llamativas para dar un toque de viveza. Es habitual encontrar azulejos con azules en los cuartos de baño. Combínalos también con colores complementarios como naranjas o amarillos.
Colores relajantes para habitaciones
Si buscas directamente colores relajantes para habitaciones apuesta por una paleta monocromática en torno al blanco o al beige, te transmitirán una sensación de unidad y un ambiente sereno perfecto para relajarse. Si te parece demasiado aburrido, prueba con distintas texturas para dar un toque sutil a los acabados.
Un azul medio también es una buena elección relajante siempre que te mantengas en esa escala monocromática. Un verde también podría funcionarte, pero recuerda que cuanto más cercano al blanco más serenidad te transmitirá.
Con estos argumentos para elegir colores para pintar una casa ya puedes ponerte manos a la brocha y planificar bien cómo distribuirlos en cada una de las estancias. Si esta entrada te ha ayudado a elegir, siempre puedes compartirla en redes sociales.