Si estás pensando en mudarte a tu primer hogar en propiedad o cambiar a uno mejor que el que ya tienes, te harás un montón de preguntas. Es posible que también te asalten muchas dudas. Para ayudarte a tomar esta decisión tan importante compartimos contigo 4 consejos imprescindibles para comprar una casa.
Comprar una casa no solo es un sueño, también es una inversión a largo plazo que te vinculará con tu banco durante mucho tiempo si la adquieres a través de una hipoteca. Si ya tienes experiencia al respecto, esta guía quizá te refresque lo que ya sabes o te descubra algo nuevo. Si estás buscando tu primera vivienda, lee estos consejos hasta el final antes de comprar una casa, te serán útiles.
1. Qué casa quieres
Puede parecerte demasiado obvio, pero mucha gente sueña con una vivienda que no se puede permitir y para la que no conseguirá una hipoteca. Antes de afrontar una inversión tan importante debes aclarar tus ideas al respecto. De hecho, mucho antes de presentar la oferta de compra.
Tómate un tiempo para pensar en tus necesidades (o las de tu familia), tanto las presentes como las que tendrás a medio plazo. Puedes hacer una lista ordenada por prioridades a la que, después, añades los extras a los que te gustaría aspirar pero que no son estrictamente necesarios.
Una vez aclarada tu visión de la casa que quieres, es hora de pensar en el presupuesto.
“Lo ideal es que la cuota de la hipoteca no suponga más del 40% del sueldo principal de la unidad familiar”
2. Cuánto estás dispuesto a pagar por ella
Entre los consejos para comprar una casa más habituales está la elaboración de un presupuesto. No empieces la casa por el tejado y te vayas a elegir una vivienda sin saber de cuánto dinero dispondrás o si el banco te concederá la hipoteca, ni sin calcular todos los gastos que conlleva, como cuánto tendrás que pagar de IVA al comprar tu vivienda.
Lo ideal es que la cuota de la hipoteca no suponga más del 40% del sueldo principal de la unidad familiar para así evitar riesgos de impago ante cualquier eventualidad. Ten en cuenta todos los gastos de hipoteca que tienes que pagar cuando hagas tus cálculos.
Por ejemplo, si el sueldo principal de la familia es el de tu mujer porque gana 2.000€ al mes, sería recomendable presupuestar una hipoteca por un importe máximo de 800€. Recuerda que los bancos no suelen conceder hipotecas por más del 80% del valor de tasación del inmueble. Por ejemplo, si quieres un apartamento valorado en 220.000€, el banco te prestará un máximo de 176.000€. Los 44.000€ restantes más los gastos, tendrás que ponerlos de antemano para que la operación tenga éxito.
Una buena práctica es tener claro cómo calcular una hipoteca.
3. Conoce el valor de la vivienda
Si ya tienes claro la vivienda que quieres y cuánto puedes gastarte, es hora de buscarla. Una buena idea es hacer una lista con todas las que vayas encontrando en los portales inmobiliarios y a través de agentes. Una vez que hayas seleccionado tus favoritas, es hora de pensar en el valor.
Hasta hace poco, valorar de una vivienda era una actividad reservada a los tasadores, los profesionales que evalúan una propiedad. A la hora de asignar un valor tienen en cuenta la ubicación, la iluminación, la superficie, el estado de conservación o la distribución de espacios en la casa.
“Uno de los elementos más importantes a tener en cuenta es el tipo de interés”
A día de hoy también existen otras formas de conocer el valor de una casa desde tu ordenador. Internet cuenta con un montón de portales de tasación, entre los que destaca www.precioviviendas.com por su precisión. Es una herramienta gratuita y con un método de cálculo acreditado por la Facultad de Ciencias Matemáticas de la Universidad Complutense de Madrid.
Para estar mejor informado puedes echar un vistazo a esta guía sobre cómo hacer una tasación de forma sencilla.
4. Qué tipo de hipoteca te interesa
El cuarto consejo al comprar una casa es elaborar una lista con los tipos de hipoteca que existen en el mercado para comparar y elegir cuál te conviene más. Uno de los elementos más importantes a tener en cuenta es el tipo de interés.
El tipo de interés es el precio que pagas a cambio de que el banco te preste lo que necesitas para comprar la vivienda. El tipo suele expresarse en un porcentaje respecto al dinero que el banco te ha prestado. Por ejemplo, si pides una hipoteca de 220.000€ con un tipo fijo al 5%, que asciende a 11.000€, al final devolverás 231.000€ a tu entidad financiera.
Sin embargo, no todos los tipos son iguales. De hecho, existen tres clases fundamentales: fijo, variable y mixto. Puedes informarte mejor en nuestra entrada sobre tipos de interés de hipoteca.
Si todavía no eres propietario del hogar de tus sueños y quieres conseguirlo, deberías echar un vistazo a nuestra Hipoteca Pibank. Un hipoteca a tipo variable, sin comisiones ni compensación por desistimiento; sin gastos en Pibank porque nos hacemos cargo de los gatos de hipoteca, incluida la tasación; y sin ataduras, porque no te obligamos a nada, ni siquiera a domiciliar tu nómina o a contratar seguros con nosotros.