Si has decidido formar una familia con hijos y te inquieta cómo puede afectar a tu carrera profesional, no te preocupes. Te ayudamos a aclarar las dudas que tengas sobre uno de tus derechos más importantes como trabajador: la excedencia por cuidado de hijos. En esta breve guía te explicamos cuándo y cómo puedes pedirla.
La excedencia por cuidado de hijos está regulada en el artículo 46.3 del Estatuto de los Trabajadores. Es un derecho que tienen todos los empleados, hombres y mujeres, y que tu empresa está obligada a cumplir siempre que respetes los requisitos contemplados en tu convenio colectivo.
La empresa no puede negarse a una excedencia y solo puede poner condiciones si ambos padres trabajan en la misma compañía, piden el cese temporal de actividad al mismo tiempo y la situación perjudica al negocio.
Por si no lo sabías, en España se solicitaron 43.899 excedencias por cuidado de hijos durante 2017. Un 92,34% fueron madres y el resto padres, según los datos del Instituto de la Mujer y para la igualdad de Oportunidades.
Puedes pedir la excedencia cuando creas conveniente para atender a tus deberes familiares por un máximo de tres años. Ten en cuenta que empiezan a contar desde el nacimiento de tu hijo. Dicho de otro modo, la excedencia puede durar hasta 3 años en espacios de tiempo fraccionados y puedes pedirla hasta que el niño cumpla 3 años. Por cierto, también puedes disfrutarla en caso de adopción.
“La excedencia por cuidado de hijos está regulada en el artículo 46.3 del Estatuto de los Trabajadores”
¿Cómo puedo solicitar la excedencia por cuidado de hijos?
Lo habitual es pedir la excedencia para el cuidado de hijos por escrito y con un preaviso de, al menos, 15 días. Echa un vistazo a tu convenio colectivo, porque a veces añade otros requisitos. Por ejemplo, un formulario de solicitud o un plazo de preaviso mayor.
En la solicitud debes añadir el nombre del hijo por el que pides la excedencia, su fecha de nacimiento y las fechas de inicio y fin del período de cese temporal. No existe una duración mínima y recuerda que puedes solicitarla en plazos fraccionados si eso te conviene. Por ejemplo, 6 meses de excedencia, 6 de trabajo, otros 6 de excedencia, etcétera.
Si llega el momento en que vence tu excedencia y todavía no has cumplido con el máximo de 3 años y quieres prolongarla, no te preocupes. Puedes hacerlo siempre que preavises a la empresa por escrito y con tiempo suficiente.
Durante una excedencia para cuidar a los hijos la relación laboral entre empresa y trabajador solo está suspendida, en ningún caso extinguida. Esto significa que no tienes que trabajar pero tampoco tienes derecho a un salario. En cambio, el tiempo de excedencia suma antigüedad y tienes derecho a los cursos de formación. Y por si te lo preguntabas: cuando estás en situación de excedencia no puedes pedir el paro, porque técnicamente no estás desempleado.
“La excedencia puede durar hasta 3 años en espacios de tiempo no consecutivos y puedes pedirla hasta que el niño cumpla 3 años”
¿Y qué pasa con tu puesto de trabajo mientras estás de excedencia? Durante el primer año tienes derecho a que la compañía reserve tu puesto de trabajo. Puedes volver a él sin ningún problema. Atento, porque si la empresa dificulta este particular, está incumpliendo con la legislación vigente y puedes reclamar.
Si tienes una familia numerosa tienen que reservártelo hasta 15 meses y si es una familia numerosa de categoría especial (con 5 o más hijos), hasta los 18 meses. Una vez que haya transcurrido este tiempo, tienes derecho a un puesto de trabajo de tu mismo grupo profesional o de una categoría equivalente.
Cumplida la excedencia, no estás obligado a solicitar el reingreso, pero suele ser recomendable hacerlo por escrito con un preaviso de 15 días. Revisa de nuevo tu convenio colectivo, porque quizá debas cumplir con algunos requisitos particulares. El derecho de reincorporación es automático y si la empresa se niega a reincorporarte, se considera como un despido nulo que puedes denunciar.
