¿Te suena el término reparcelación? ¿Sabes que tiene que ver con el desarrollo urbanístico del municipio en el que vives? ¿Y tienes claro cómo te afecta? En esta entrada compartimos contigo la información para despejar tus dudas.
La reparcelación puede ser fuente de preocupaciones, sobre todo en algunos casos forzosos. Sabemos que no es fácil y que la mejor forma de estar tranquilo es estar informado.
Una reparcelación es un proceso para distribuirlas parcelas iniciales de una actuación urbanística en otras aptas para la edificación. Para que nos entendamos, consiste en la agrupación de fincas y parcelas sujetas a transformación para modificarlas de acuerdo al plan urbanístico de un municipio.
“Una reparcelación es un proceso para sustituir las parcelas iniciales de una actuación urbanística por otras aptas para la edificación”
Por ejemplo, si tu ayuntamiento quiere cambiar el uso de una amplia zona de suelo agrícola por una superficie de uso residencial, tendrá que planificar una reparcelación. Existen dos tipos de procedimientos: voluntarios y forzosos.
En la reparcelación voluntaria, los criterios con los que se diseñan las nuevas parcelas son pactados con libertad por los intervinientes en el proceso urbanístico.
En cambio, la reparcelación forzosa puede ocurrir cuando no se consiga llegar a un acuerdo voluntario. En esta situación, se establece una norma que aspira a que se tengan en cuenta los derechos de los propietarios afectados y que ninguno se beneficie o salga perjudicado respecto al otro como consecuencia de la reparcelación.
Reparcelación y parcelación
Es importante no confundir parcelación y reparcelación. Aunque suenen similares, son procesos urbanísticos distintos. La parcelación es, simplemente, una operación de división o segregación de fincas o parcelas, y es aplicable tanto al entorno rural como al urbano, siempre respetando la legislación aplicable a cada tipo de suelo.
“Es una técnica de gestión o de ejecución urbanística”
En cambio, la reparcelación es más una agrupación de fincas dentro de un ámbito afectado por una actuación urbanística dentro de los planes de un municipio. En otras palabras, es una técnica de gestión o de ejecución urbanística.
La filosofía o teoría de fondo detrás de una reparcelación es distribuir de forma justa los beneficios y las cargas de la nueva ordenación urbanística, así como regularizar la configuración de las fincas y definir su aprovechamiento conforme al plan futuro.
Por si quieres entrar en detalles, una reparcelación cuenta con 5 fases:
- Aprobar la reparcelación dentro dentro de un plan urbanísitco.
- La formación de la Comunidad Reparcelatoria, que incluye a los propietarios, a los titulares de derechos y a la Administración competente.
- Diseño del proyecto de reparcelación, la herramienta técnica para documentar y ejecutar el proceso. Debe incluir todas las operaciones de cesión, distribución y transformación de realidad jurídica de los terrenos.
- Información pública del proyecto durante un mes, con citación personal a los interesados.
- Acuerdo de aprobación del proyecto de reparcelación y aplicación del mismo de forma jurídica en el ordenamiento urbano.
Como puedes comprobar, una reparcelación te puede afectar si tu propiedad está dentro del proyecto urbanístico que promueve tu ayuntamiento. No te preocupes, porque formarás parte del proceso como miembro de la Comunidad Reparcelatoria. Y estarás dentro del proyecto.
Esperamos que esta información haya despejado tus dudas y tengas claro qué es una reparcelación. Si la entrada te ayudado, comparte ahora en tus redes sociales para que sea de utilidad a otras personas.